Asi que al día siguiente me junté con un par de holandeses y un neocelandés, alquilamos un coche juntos y salimos a la mañana siguiente.
La mitad de los días las condiciones del viento no fueron favorables (soplaba de norte) y las orcas ni siquiera aparecieron. Sin embargo el resto del tiempo estuvieron muy activas patrullando las playas y maravillándonos con repetidos intentos de ataque, e incluso con dos varamientos que pude observar perfectamente en la distancia gracias a mis viejos y todavia operativos Pentax. Y sí, la foto se resistió, pero muy contento igualmente. Además ya tengo excusa para otro año, Oooh, yeah!.
Tras tantos días de emociones vividas en la Patagonia, un bus me lleva tras 24h hasta San Juan (en la provincia del mismo nombre), donde mi amiga Gaby me acogió en su casa y recobré fuerzas, durmiendo, comiendo, leyendo y teniendo largas horas de relax. Si, ya sé, ni que estuviera de vacaciones, no?.
Gaby, muchas gracias por todo. Una vez más, un placer compartir ideas y pensamientos contigo.
(por cierto, te envio las fotos via mail).
Con destino al Salar de Uyuni en Bolivia, partí rumbo norte. Tras pasar por distintos y agrestes paisajes, un muy buen autobús me dejó un día más tarde en Villazón, pequeña ciudad fronteriza entre Argentina y Bolivia. Al bajar del autobús inmediatamente percibes que el entorno se ha transformado totalmente.y menos algunos turistas blanquitos, todos los rostros son ya de tez morena y curtidos. Se oye alrededor tanto "quechua" como español, y criollos e indígenas con sus atuendos tradicionales, se mueven de un lado a otro sin casi prestar atención al extranjero. a diferencia de otros lugares donde te abordan. Cosa que yo personalmente agradezco.
Mucho movimiento alrededor, taxis, vendedores ambulantes, cambistas de moneda, puestos de comida, y mucho frío. Lo más curioso de todo es que con todo esto pasando, no hay ruido ni vocerío. Nadie da voces, habla alto o grita. Todo es muy silencioso. Casi casi es como una película de cine mudo. Si esto fuera en España sería mucho peor que el mercado del cabañal.
Las fronteras, especialmente en latinoamérca, pueden ser lugares delicados de seguridad, asi que hay que extremar las precauciones, afinar la vista y actuar rápido para salir de allí cuanto antes mejor. Especialmente viajando solo.
Tras cruzar la frontera, sellar el pasaporte y preguntar un poco, doy con el "colectivo" que va a Tupiza. Me siento al lado del conductor. Imágenes de cristos y virgenes cuelgan por todas partes. En la radio suena "El vuelo del Cóndor". El colectivo va hasta los topes y el corto trayecto de una hora se vió amenizado por las conversaciones en quechua de más atrás, y por las cuatro paradas que tuvimos que hacer a reconectar la batería... El conductor nos miraba y sonreía con seguridad cada vez que volvía a subir y a ocupar de nuevo su lugar.
Tupiza es una pequeña y agradable población situada ya a casi 3.000m de altura, la cual es una de las bases para conocer el famoso Salar de Uyuni. Eso sí más tranquila y mas desahogada de las hordas turísticas que Uyuni.
Desde allí y durante cuatro días, en potentes Toyotas todoterrenos, se llega a Uyuni y al Salar, pasando por increíbles lugares a casi 5.000m de altura. Cumbres nevadas, volcanes activos e inactivos, grandes lagos de distintos colores -azul, verde, rojo- poblados por miles de rosados flamencos, salinas, barrancos, amplios valles en U, ríos,aguas termales, pequeñas aldeas perdidas, géiseres y un largo etcétera, todo bañado de un silencio helado y sepulcral. Y como no, rebaños de llamas y vicuñas salpicándolo todo y en los parajes más recónditos.
Llamas andinas |
El altiplano es un lugar donde la vida es muy dura para sus habitantes. Hace calor por el día, con un sol abrasador que quema fácilmente la piel, y frío por la noche (-10ºC, y era primavera). Sabía que iba a ser un lugar curioso, pero jamás me esperaba semejantes maravillas.
Durante el día estás en constante movimiento con los 4x4 avanzando por la ruta, que en ocasiones serpentea por caminos muy altos y expuestos, de los que le encogen el estómago a uno al mirar hacia abajo. A mediodía se hace una parada para que la cocinera prepare el almuerzo al grupo, y tras un mate de coca calentito, se reanuda la marcha rápidamente, de forma que se llegue al lugar donde se va a pernoctar antes de que caiga la noche.
Máxima altura que alcanza la ruta. |
Los niños de lejanos pueblos del altiplano convierten en juguetes cualquier cosa |
Humildes casas donde dormimos la primera noche. Escenario de mi ataque nocturno del soroche |
Vieja ciudades que albergaban hasta 500 habitantes hasta hace tan solo ochenta años...a casi 4000m! |
Se para a dormir en pequeñas casas particulares en medio de la nada, que ha ampliado algunas habitaciones más para acoger a los grupos. No hay agua ni duchas, en algunos ni siquiera luz, y obviamente no hay calefacción, con lo que las noches son bastante frías.
Yo no llevo saco de dormir para viajar más ligero, asi que les tenía que pedír mantas extra a los americanos e ingleses del grupo, que si lo llevaban. Llegué a dormir con hasta siete mantas, y aún así no entraba en calor y podía dormir hasta la 1am o las 2am, desde las 9m o 10m que nos acostábamos. Pero las camas eran cómodas y uno se levanta más o menos descansado.
La Primera noche, después de cenar algo caliente, y una vez entre en calor un poco en la cama, la “puna” (como llaman aquí al soroche o mal de altura) me atacó sin piedad, y me hizo levantarme en medio de la noche y retornar la cena a la pachamama. A partir de ahí, ya no me quité el fuerte dolor de cabeza por casi dos días. Y es que pensando, pasé de 200m de altura llegando de San Juan, pasando por los 3000m de Tupiza y finalmente a los 4.800m donde nos encontrábamos, en menos de dos días.
Es como subir desde casi el nivel del mar a la cima del Mont Blanc en menos de dos días, sin aclimatación y quedarse allí paseando unos días. Una verdadera presión y estrés para el organismo.
Dejando de comer, descansando en la medida de lo posible y sobretodo, “boleando” todo el día (mascando hoja de coca), pude recuperarme y acelerar la aclimatación a menos de dos días. Y no me quejo pues normalmente lleva entre cuatro y seis. La hoja de coca es mano de santo para el soroche. Entre otros, elimina el apetito en gran medida, es analgésico, vigorizante y energizante.
Fango hirviendo a altas temperaturas en la zona de los géiseres. Olor a azufre lo inunda todo. |
Con cada día llegaban lugares bellísimos, fríos, remotos y agrestes. Y en los lugares más ignotos, donde lo último que piensa uno es que la vida humana es posible, allí aparecia una pequeña casa de adobe de campesinos, con su pequeña plantación de quinoa, cereal o yuca y un pequeño rebaño de llamas.
La verdad, sobran las palabras, sólo hace falta ponerse delante de estos paisajes, admirarlos y ver que nos sugieren.
Aguas termales sulfurosas naturales a 40ºC. Que gozada tras pasar frío esa noche! |
Zona de géiseres |
Lagos cargados de minerales y volcanes nevados observando. |
Flamencos rosas gigantes volando hacia los dormideros al atardecer. |
Esculpido por los elementos durante miles de años, famoso árbol de piedra. |
Cañon del Inca |
Volcan activo, todavía humeante. |
El Salar de Uyuni es uno los lugares más impactantes y sorprendentes que he visto nunca.
Se encuentra a casi 4.000m y tiene una extensión de aproximadamente 12.000km2. En su lado más largo tiene casi 400km. Imaginaros una superficie plana y blanca de dicha longitud.
Con cada época de lluvias el Salar expande su superficie cada año. Parece que cuando el agua lo inunda todo, saca a la superficie más sal que se encuentra entre la superficie y los 150m de profundidad.
La sal pura en semejante cantidad genera ciertas distorsiones en el campo magnético y por tanto falsea las lecturas con brújula. Esto sumado a que cuando está inundado se convierte en un gigantesco espejo que refleja el cielo, hace que sea extremadamente difícil ubicarse y no perderse. No se distingue la tierra del cielo, todo es uno.
Todos los años hay gente que se aventura a cruzar el Salar –tanto viajeros como locales- y se extravían. Para cuando los encuentran es ya demasiado tarde. La naturaleza es así. Belleza letal. Como la Selva Esmeralda.
Me callo ya. Mirad esto…
Amanecer en el Salar |
Añadir leyenda |
Casas construidas con bloques de sal. Absorben el calor por el día y lo emiten por la noche. Se combate bien el frío nocturno. |
Increíble,no? |
Se extran miles de toneladas de sal al mes. |
A veces da la sensación de estar en el Polo. |
Antes de dejar el Salar, me enteré que desafortunadamente han descubierto un enorme yacimiento de Litio bajo el Salar, el cual, al actual ritmo de consumo de este elemento en Bolivia, podría durar más de cinco mil años.
Pero las malas noticias son, que el gigante comunista amarillo, hambriento de recursos, ha firmado un acuerdo con Evo Morales obteniendo los derechos de explotación en el Salar. Eso sí, a cambio de construir X escuelas, viviendas,bla,bla,bla,etc,etc… en las poblaciones adyacentes.
….Queridos todos…os recomiendo que vayáis a ver esta única y extraña maravilla del Salar de Uyuni en cuanto podáis…antes de que sea demasiado tarde.
Esperemos que no sea así, y podamos seguir disfrutando de este único paraje, asi como las generaciones venideras.
Jaime, viniendo de tí, viajero curtido en mil batallas, primo hermano de Willy Fogg, que almuerza dos o tres IB+ platino semana si semana no, tua palabras son un halago. Me alegro que esto te entretenga compañero. un abrazo!!
ResponderEliminarToñitaaaa! como escribiste en una entrada antigua casi ni te veo!
ResponderEliminarespero que estés bien guapetona y todo vaya sobre ruedas.
Quilla, me honraría tenerte de seguidora en el blog , a ver si te veo por ahi.
besazooo!
(cuando nos veamos no se por donde voy a empezar a contarte...)
Paco, me tienes ensimismado con tus periplos... me alegra que estes disfrutando de esa experiencia unica. Apunto en mi libreta el Salar de Uyuni como destino inminente.
ResponderEliminarMe encanta tu narrativa y vocablo de la cual siempre aprendo algo (esta vez me llevo soroche en el zurron).
Un abrazo y nos vemos pronto!!!
Peñalva
Peñalvaaaa, afirmativo hermano, "debes" ver estos parajes en algún momento, pero aclimatandose apropiadamente...o conocerás a tu amigo el "soroche".
ResponderEliminarTe veo en un par de meses or so.
un abrazo bro.
Kike, ya he visto que estás de vuelta de Colombia. Te contesto a tu mail...
ResponderEliminarSeguro que la selva Esmeralda de Sta Marta te ha tratado muy bien...y me cuentas. Habrás estado muy cerca de Samilita...
Paquito soy Luisito, lo primero, desconozco si te llego mi mensaje de felicitación, por si acaso, FELICIDADES que los aventureros por el mundo también cumplen años.
ResponderEliminarCreo que después de varios intentos estoy siendo capaz de aclararme con esto.
Paquito hoy he estado hablando con Kikote ha sido papá por segunda vez , me ha llamado para preguntarme como contactar contigo por el blog, imagino que lo conseguirá.
Bueno amigo veo que sigues "fet un mil homens", cuidate y continua narrándonos tu diario de abordo que esta de cine. Un abrazo, Lydia y las nenas Okkkkkkkkkkkkkkkkkkk.
Un colega mio acaba de estar en el salar y me ha dicho que es flipante. A el el Soroche no le vino ya que viven en Santiago de Chile y anda mucho por los Andes.
ResponderEliminarFlipantes las fotos Paco!!
Ley un Articulo sobre el salar y su Litio. No hay mas litio en el planeta que allí y por supuesto que van a destrozar el sitio. El Litio es absolutamente imprescindible para la "civilización", todos los ordenadores y Moviles lo usán!!!!!!
Había oido lo del litio, y es una verdadera lástima... Pero estamos inundados de baterias y de gadgets que lo utilizan... Habrá que plantearse no renovar el móvil cada 2 años!
ResponderEliminarMuy guapo todo!